Estos versos
son para la mujer que amo,
ella que cada mañana
me alegra con sus besos.
Simplemente es perfecta,
perderme en su mirada me encanta.
Ella me entiende, me cuida,
y me envuelve en su belleza.
Lo mejor es cuando me mira,
sus dedos con los míos entrelaza,
y como si no importara nada,
me besa.
Cuando lloro, lo hago sobre su hombro.
Cuando grito, ella lo hace conmigo.
La amo, y ella hace lo mismo.